Aunque la fecha exacta es discutida, según la tradición que arranca en el historiador Plutarco, tal día como hoy del año 356 a.C. nació el rey Alejandro III de Macedonia. Hijo del rey Filipo II, consolidó la conquista de Grecia emprendida por su padre y puso en marcha una campaña de liberación de las ciudades griegas de Asia Menor del yugo persa. La operación se convirtió rápidamente en la campaña de conquista más formidable que vio el Mundo Antiguo. A lo largo de diez años sometió sucesivamente a las ciudades fenicias, el Egipto faraónico y el Imperio Persa, llegando a adentrarse después en Asia Central y la antigua India. Su ejército exhausto le impuso el cese de las campañas, dirigiéndose de regreso a Babilonia. Allí murió inesperadamente cuando apenas tenía 33 años. Fue una leyenda ya en vida y después de su muerte todos los militares y estadistas de la Historia han intentado compararse con él.
