Accidente aéreo de los Rodeos

 El 27 de marzo de 1977 tenía lugar en el Aeropuerto de Los Rodeos (Tenerife) un accidente que se llevó la vida de 538 personas.

Dos Boeing 747 de las líneas aéreas KLM y Pan Am, colisionaron cuando el primer de ellos estaba a punto de despegar y chocó con el de Pan Am que estaba rodando en pista.
Ese día todo estaba en contra. El aeropuerto de Los Rodeos había tenido que acoger a gran número de aviones tras echar el cierre del Aeropuerto de Gran Canaria por un atentado. Además, la niebla existente no ayudaba a que los aviones se guiasen con seguridad que, unido al mal funcionamiento de las luces de pista, a la visibilidad de apenas 300 metros y a que no había radar de superficie, presagiaban una catástrofe como la que se dio.

El piloto de KLM pidió permiso de despegue, pero la torre no autorizó el despegue inmediato, sino que autorizó el plan de vuelo. La falta de comunicación entre torre y avión, unido a todos los factores externos, hizo que cuando el avión de KLM se encontraba a máxima potencia listo para despegar y sin apenas visibilidad, chocara con el avión de Pan Am que estaba rodando por pista esperando su turno para el desembarque.

Ambos pilotos intentaros evitar el choque, el de KLM acelerando el despegue y el de Pan Am echándose a un lado pero nada podía hacerse. El primer avión cayó incendiándose las toneladas de combustible que tenía en su interior. Todos los pasajeros y tripulación de cabina murieron. El avión de Pan Am también sufrió daños pero 70 de sus ocupantes lograron escapar del avión.

Tristemente se le recordará como el accidente aéreo con mayor número de víctimas mortales de la historia de la aviación.